Un aire fresco envuelve la ciudad… somos parte del viento. En RadioUrbana, cada segundo de cada una de las 24 horas es concebido como un vehículo que lleva un mensaje. No son ondas puestas a vagar; son mensajes dispuestos a comunicar -recuerdos, informaciones, acordes y compases, sensaciones y noticias- un todo, una señal que se multiplica en códigos. A la vuelta de cada palabra, sonido y silencio, aquí habrá siempre un mensaje.

viernes, 2 de enero de 2009

195) ¡Feliz Año Nuev9!

Comenzó un nuevo año y habrás festejado a tu manera, pero siempre hay alguien que quiere decir algo al respecto. Aquí no será diferente, obvio... pero lo haremos a través de otras teclas. Te dejo estas líneas que escribió Sebastián Lalaurette de la Agencia MP y que puede estar bueno para compartir con más gente. Y si querés, después nos contás tus sensaciones a través de radiourbanafm@yahoo.com.ar. Aquí va:

CINCO FORMAS DE NO EMPEZAR 2009

Dar consejos es una operación difícil, antipática, incómoda, costosa para ambas partes y casi siempre inútil, por lo que en general es aconsejable no dar consejos, si es que tan paradójica afirmación puede significar algo. A continuación voy a aconsejarte porque siempre, siempre, siempre que uno empieza diciendo que no hay que dar consejos es para, inmediatamente después, ponerse a decirle al otro cómo debería vivir su propia vida. Así que acá vamos: cómo no deberías encarar el año 2009, que ya está sobre nosotros, con sus fauces abiertas y una mirada estremecedora en esos dos ominosos ceros.

1. AÑO NUEVO, VIDA NUEVA. No. Mentira. Nada se termina "de verdad" el 31 de diciembre, salvo el calendario y la valuación de la patente del auto. Si pretendés cortar de raíz con todo lo que constituye tu vida hasta este momento te vas a encontrar sin trabajo en medio de una crisis económica internacional, sin proyectos en curso (porque alguno debés tener ahora, supongo) y sin amigos que te apoyen cuando, indefectiblemente, la chica que te rompió el corazón durante 2008 y que te propusiste olvidar con el cambio de año vuelva en mayo o junio para volver a hacerte infeliz.

2. UN AÑO LAVA AL OTRO. Este punto sería la inversa del anterior. Querer arreglar en 2009 todo lo que te salió mal en 2008 no sólo es una quimera sino que te deja por delante todo un año deslustrado, subordinado, repleto de obligaciones desagradables, como esos infames cuadernos de tareas de la escuela primaria donde te hacían anotar ejercicios para las vacaciones. Aceptalo: este año ya está jodido, no tiene vuelta atrás. Tratá de disfrutar el que viene.

3. ¿FELIZ QUÉ? AH, SÍ, SÍ, IGUALMENTE. Bueno, bueno. Que nada se termine "de verdad" por el cambio de año no significa que uno tenga que atravesarlo insensiblemente, sin prestarle atención. Es buen momento para hacer balances y tomar resoluciones. Pensá en tres o cuatro cosas que quisieras mejorar en tu vida y proponete firmemente hacer todo lo posible para que esas mejoras sucedan durante 2009. No significa nada en términos físicos, pero es una buena forma de engañar a tu propia cabeza para que se ponga a trabajar.

4. MIRACLE MAN. En el punto anterior, el fragmento clave es "tres o cuatro". Imponerse veinticinco resoluciones, o doce (una por mes), o cincuenta y dos (una por semana), o trescientas sesenta y cinco (una por día), garantiza dos cosas: un alto porcentaje de fracasos y una baja moral a partir de agosto. Mala receta. Relax, man.

5. SALUD, DINERO Y AMOR. ¿Eso es todo, maldito monstruo desgraciado egoísta? ¿Salud para tu propio cuerpo, dinero en tu propia billetera, amor destinado a vos en particular? Por eso el país está como está, querido. Incluí en tus resoluciones algo que vaya más allá de vos mismo y de tu círculo íntimo. Proponete hacer algo útil o bello para los demás (ya sea para un grupo determinado o para la sociedad en general). Abandoná la idea de que el tiempo productivo es sólo el tiempo que empleamos en ganar dinero, una idea absurda y perniciosa si las hay. Mucha gente trabaja toda su vida a cambio de un sueldo sin producir nada jamás. Proponete algo que te haga sentir mejor más allá de las recompensas externas.

Bueno, basta de cháchara, ¿no? ¡Feliz 2009! y éxitos, claro.

Sebastián Lalaurette
redaccion@agenciamp.com.ar